El exterior de todo es su carta de presentación. En esta época, en la que lo primero que valoramos es el exterior, nos damos cuenta de que lo que se ve, es lo que marca la diferencia.
Imagina que vas a comprar a una tienda: su escaparate, la parte que se supone que debería llamarte por lo atractiva y lo vistosa que tendrá que ser, es todo lo contrario: está sucia, mal enfocada y no tiene ningún atractivo. Seguramente pasaras de largo, no te molestarás en entrar en un lugar en el que desestiman el valor estético de las cosas.
Los cristales de los escaparates son una parte muy importante de las tiendas, reflejan la limpieza y la dedicación de las personas al cargo de esta. Lo mismo vale con las oficinas que tienen paredes de cristal: una empresa o una tienda limpia da mucha más confianza que una que esté sucia o descolocada; los cristales de las vitrina deben de estar impolutos, las cristaleras siempre inmaculadas, las paredes sin graffitis y las fachadas muy limpias.
No es solo una cuestión de estética es también una cuestión de sanidad: en una fachada sucia es más probable que aparezcan bichos y hongos, mientras que si las fachadas y los cristales de los negocios están limpios, la impresión será mucho mejor y más favorable ya que atraerá a los clientes.
Por suerte para todos los que se preocupan por la presencia de su local, todos los que quieren que la tarjeta de presentación sea la adecuada, podéis poneros en contacto con nuestra empresa: somos especialistas en limpiezas tanto de pavimentos, de falsos techos, limpieza de cristales y trabajos verticales.
Llevamos más de diecisiete años de experiencia en el sector, lo que nos confiere la capacidad de realizar cualquier trabajo vertical que se requiera. También somos especialistas en borrado de graffitis y rehabilitación de fachadas en general. Nada mejor que vivir en un edificio en el que todo está limpio, o trabajar en un establecimiento en el que parece que no hay cristales de lo limpios que están.
¿Por qué es tan importante que los cristales estén limpios?
Porque a nadie le gusta mirase en un espejo y ver manchas, a nadie le gusta mirar a través de una ventana y que no sea transparente, ni mirar un escaparate y que haya suciedad por todos lados. La limpieza es primordial, sobre todo en la atención al público. Por esto los negocios contratan a empresas como la nuestra, para que se ocupen del mantenimiento de los escaparates, que por estar en la calle sufren manchas a diario. Y como la calle es de todos, los jóvenes graffiteros en ocasiones dejan su firma donde no deben.
Una buena empresa como Proliser, que se ocupe de borrar los graffitis de las paredes y pulido de cristales, debería estar en la agenda de todas las empresas.