Limpia suelos para eliminar chicles y suciedad

Los suelos exteriores acumulan un tipo de suciedad diferente a la que se acumula en el hogar o localizaciones interiores como las oficinas, tiendas o espacios donde no hay una actividad industrial. Pero a la intemperie, los suelos y el pavimento recogen una serie de contratiempos en suciedad y agentes devastadores para la higiene, aunque debe llevarse a cabo igualmente pero con técnicas diferentes, otras herramientas y otros productos limpia suelos cuando se trata de eliminar chicles, grasa o pegatinas, y otros restos adheridos.

Pero al igual que existen exteriores diferentes como es la acera de la calle o el suelo de la terraza que no está cubierta, los distintos materiales requieren una limpieza específica capaz de eliminar la suciedad y las manchas sin agredir ni crear otras adicionales que empeoren la situación. De esta manera, nos encontramos con que el granito, la madera, la tarima, la cerámica o gres, el mármol y las baldosas de barro que crían verdín, barro o moho, suelen estar presentes en superficies de suelo exteriores.

Patios, terrazas, entradas a porches, los alrededores de la piscina, de las instalaciones deportivas, tienen pavimentos con mucho uso y necesitan limpieza. Y el método más sencillo para devolverles la higiene es el agua y jabón, a ser posible agua a presión y caliente para el caso de las manchas de grasa. Cuando hay verdín y moho, el agua sólo debe aplicarse mediante una bayeta o esponja húmeda conteniendo detergente, pero antes hay que haber eliminado los restos de moho mediante arrastre.

A ser posible, aplicar un producto especial antimoho evitará que se forme más verdín y hongos en las zonas sombrías donde no llega el sol ni alcanza a secar el suelo. El verdín en las baldosas de barro, además de poder resultar antiestéticas, causa algunos accidentes por resbalón al caminar sobre estos lechos de moho verde. Para evitarlo, hay que aplicarse con un cepillo metálico y producto especial disuelto en agua.

De utilizar un remedio casero, el vinagre de alcohol mezclado con agua da buen resultado al cepillar con las púas metálicas. Los chicles, esas manchas con relieve tan fastidiosas, se quitan productos limpia suelos o con cubitos de hielo y raspando con un filo de cuchilla o cutter, pero esto aplica para ejemplos domésticos esporádicos. Si hay que eliminarlos en el suelo donde hay mucha afluencia de personas, lo mejor es el agua a presión con un disolvente que venden en droguerías.